Valores Franciscanos

PRINCIPIOS INSPIRADORES

El Instituto Superior de Educación Público “la Inmaculada” asume los siguientes principios axiológicos.

Principio Cristocéntrico Mariano. Nuestra identidad es Cristo como Alfa y Omega de todo nuestro ser, pues solo desde Cristo, en Cristo y hacia Cristo tiene sentido la vida de todo cristiano.
“Ningún maestro educa sin saber para qué educa y hacia donde educa” (S.D.265). Educar hacia un proyecto de hombre en el que viva Jesucristo; reconociéndolo como centro y eje del universo, modelo y guía del hombre, solidario con los sufrimientos y las esperanzas de la humanidad; imagen de Dios no visible; “Este es perfecto y excelente, capaz de recibir todo el amor infinito y devolver ese amor, obra maestra de la trinidad “Sumo bien todo bien” en quien Dios agota toda su sabiduría, toda su omnipotencia y todo su amor, según afirma el maestro de la Escuela Franciscana Duns Escoto: “Jesucristo ayer, hoy y siempre” (Hebreos 13,8).

La misión educativa de María, dirigida a un hijo tan singular, presenta algunas características particulares. Ella garantizó solamente las condiciones favorables para que se pudieran realizar los dinamismos y los valores esenciales del crecimiento, ya presentes en el Hijo, será Él quien revele, desde el episodio de su pérdida y encuentro en el templo, su plena conciencia de ser el Hijo de Dios, enviado a irradiar la verdad en el mundo, siguiendo exclusivamente la voluntad del Padre. De maestra de su hijo, María se convirtió así en humilde discípula del Divino Maestro, engendrado por ella. Permanece la grandeza de la tarea encomendada a la Virgen Madre: ayuda a su Hijo Jesús a crecer, desde la infancia hasta edad adulta, “en sabiduría, en estatura y en gracia” (Lc.2,52) y a formarse para su misión. Su experiencia educadora constituye un punto de referencia seguro para los cristianos que están llamados, en condiciones cada vez más complejas y difíciles, a ponerse al servicio del desarrollo integral de la persona, para que lleven una vida digna del hombre que corresponda al proyecto de Dios.

Principio Humanista Cristiano.- Este principio tiene como fundamento axiológico el amor, que interioriza los valores de la verdad, el bien, el servicio, la participación, la libertad, el respeto a la dignidad humana, la belleza y las trascendencia del ser.

Así mismo este principio, capacita a la persona para mantener su relación con Dios, consigo mismo.

“Formando docentes de excelencia con compromiso social Cristiano”